Creando una Cultura de Cuidado: ¿qué cargas contigo?

Creando una Cultura de Cuidado: ¿qué cargas contigo?

*Lectura de dos minutos (To read in English, click here)

De vez en cuando, mi terapeuta juega un pequeño juego conmigo. Me entrega su botella de agua. Luego, su computadora portátil. Lo siguiente es su bolso, cuaderno, bolígrafo y teléfono celular. Con mis brazos llenos e incapaz de sostener nada más, ella pregunta:

“¿Qué estás haciendo?” Yo respondo: “Cargo todas tus cosas”. Luego dice: “Así que detente”.

Su pequeño juego me tiene cargando objetos físicos, pero el objetivo es entender cómo puedo a veces (como muchos de nosotros) cargar las cosas emocionales de otras personas. Ella vuelve a sacar este pequeño juego cada vez que hablo de cargar y preocuparme por los problemas y cuestiones de otras personas.

Por ejemplo, si tengo una interacción negativa con alguien, pero me siento segura de que he actuado con amabilidad y respeto, los persistentes sentimientos negativos de ellos no son mi responsabilidad de soportar o arreglar. O, si establezco un límite personal en una relación que decepciona a otra persona, tampoco es mi responsabilidad de atender sus sentimientos.

Soy responsable de lo que yo aporto, pero no de lo que otros eligen aportar. Nada de esto significa que no trato de comunicarme y solucionar problemas. Sin embargo, sí significa que no dejo que las cosas sobre las que no tengo control (como la forma en que alguien más siente o piensa de mí) ocupen espacio y energía en mis pensamientos.

Y cuando trato de determinar qué es mío para llevar y qué no, recuerdo este simple mantra:

Si no puedo controlarlo, no debería cargarlo. No es mío para llevarlo a cuestas.

Todos tenemos suficiente equipaje propio. ¿Por qué diablos querría alguien agregar más a una carga ya pesada?

El bagaje emocional de la infancia y básicamente cualquier relación que hayamos experimentado crea un bagaje que a veces llevamos con nosotros por el resto de nuestras vidas. Es simplemente una realidad al conectarse con los demás. Por lo tanto, llevar equipaje es inevitable. Pero tenemos la opción de elegir lo que llevamos y por cuánto tiempo.

Incluso cuando llevamos lo que es legítimamente nuestro propio equipaje, simplemente podemos decidir que lo hemos cargado el tiempo suficiente y es hora de dejarlo. Podemos cambiar los hábitos. Deténgase y haga una pausa antes de reaccionar. Esto proporciona el espacio y el tiempo para responder de manera apropiada en lugar de las formas habituales creadas a menudo por el equipaje de las relaciones pasadas.

Podemos determinar intencionalmente nuestros comportamientos y respuestas dejando nuestro equipaje y actuando basado en la situación actual y no según los patrones de nuestro pasado.

Esta vida es un viaje para cada uno de nosotros. ¡Podemos disfrutar de los altibajos y podemos decidir qué empacamos en nuestras maletas!

 

 Stevie Cromer es la Directora de Enriquecimiento Cultural de LUNA Language Services. Stevie proporciona regularmente contenido atractivo al equipo de LUNA para fomentar una cultura de cuidado dentro de nuestra propia familia en LUNA. Para obtener más sugerencias y recursos sobre cómo puede construir una cultura de cuidado en toda su organización, comuníquese con Stevie en stevie@LUNA360.com.